Melilla cuenta con más de 8 kilómetros de costa cuyo punto medio es el puerto. Al sur se abre una extensa bahía con aguas tranquilas y playas de arena fina. Su parte norte cuenta con interesantes acantilados, playas y ensenadas. Aquí solo una muestra de lo que puedes disfrutar. Se puede iniciar la travesía desde cuatro puntos: Horcas Coloradas y Ensenada de Galápagos en la zona norte, y puerto deportivo y dique sur para travesías en la bahía.
Espectacular playa bajo las murallas de Melilla la Vieja. Tiene acceso desde las cuevas del Conventico, pero no es público, así que solo se puede acceder por mar. Pequeña playa de conchas, aguas de color turquesa,
Pues sí, una cascada directa al mar. Se trata de la salmuera de la desalinizadora de agua de la ciudad, que sobra del tratamiento. Espectacular y divertido.
Al final de la playa de Horcas Coloradas existe una pequeña cala de arena fina, bajo unos espectaculares acantilados, poco accesible desde tierra, en la que se suele descansar y tomar un tentenpié camino de Aguadú o vuelta al punto de partida.
Cerrada en invierno al público, abierta a la práctica de piragüismo y por supuesto accesible desde el mar. Playa de arena bajos las murallas del primer y segundo recinto Un lugar ideal para hacer una parada, calentarse al sol y tomar un baño.
Bajo las históricas murallas de Melilla La Vieja, en el antiguo embarcadero que usaban nuestros antepasados, existe una cueva que en días tranquilos y marea baja podemos entrar a visitarla.
Tras el puerto comercial podemos navegar por toda su longitud. Entre sus rocas se puede observar una especie en vías de extinción la patella ferrugínea o lapa gigante, siendo el punto de más densidad de esta especie en el mundo.
Playas de arena fina y dorada de la bahía de Melilla. Son playas abrigadas y con aguas tranquilas. Especialmente indicadas en invierno fuera de la temporada de baño cuando podemos disfrutar de toda la extensión de las playas.
El punto de salida del puerto deportivo es la rampa de varada. Es de uso público con el pago de una tasa. Sale directamente a la bahía de Melilla y de ahí se accede a toda el litoral de Melilla pudiendo hacer travesías de corto recorrido por la bahía o rodear todo el puerto comercial hacia la zona norte.
Es la zona más tranquila, para empezar a practicar y principiantes la mejor opción. En invierno se puede hacer tierra en cualquier lugar de las playa, en verano en los canales de navegación.
La zona más alejada antes de cruzar a Marruecos, para los que estén más preparados. Zona natural, con aguas turquesas e ideal para hacer snorkel y observación de aves. Es zona protegida por la legislación europea.
A unos cientos de metros justo frente a la desalinizadora se localiza una boya marina a la que nos podemos acercar
La antigua dársena pesquera es la zona más tranquila de la costa melillense. Zona especial para dar los primeros pasos en kayak.
El Dique Norte es el extremo norte litoral de Melilla, a partir de ahí se abre el Cabo Tres Forcas en Marruecos.
En Medio de las playas de la bahía de Melilla. Si coincide que hay flujo de agua y está abierta la zona de arena se puede penetrar unos metros.
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